– Demanda de agua: Como ya se ha comentado, la incorporación de humo de sílice produce un aumento de la demanda de agua, debido principalmente a su gran superficie específica, por lo que generalmente será necesario el uso de aditivos plastificantes o superplastificantes que compensen esta demanda.
– Tiempo de fraguado: El humo de sílice por sí mismo no afecta al tiempo de fraguado del hormigón, aunque generalmente se suelen incluir aditivos químicos que pueden modificarlo (plastificantes y superplastificantes).
– Exudación: Se reduce considerablemente, debido a la finura del humo de sílice.
– Color: Tanto el hormigón fresco como el endurecido presentan un color más oscuro. Esta diferencia se acentúa más en hormigones con alto porcentaje de humo de sílice o en aquellos en los que el humo de sílice tenga un elevado contenido en carbón.
– Aireantes: La dosificación de aireantes para producir un cierto volumen de aire en el hormigón generalmente aumenta con la incorporación de humo de sílice.